Nada está perdido, de momento. El informe desfavorable de la comisión provincial de Patrimonio, dado a conocer esta semana, no supone la pérdida de la subvención de medio millón de euros para la segunda fase de las obras del Castillo del Hierro. Es lo que dice el ayuntamiento, a la espera de la siguiente reunión de Patrimonio, el próximo miércoles día 3 de noviembre, que debería aceptar la memoria de corrección del proyecto y dar luz verde al diseño del espacio cultural.
De forma resumida, lo que ha pasado es que el proyecto de castillete destinado a convertirse en observatorio de cernícalos, incluido en la segunda fase de la restauración, tiene exceso de volumen, según la comisión de Patrimonio. Impacta excesivamente en el conjunto del castillo. Lo que iba a ser un simple desembarco de la escalera y del ascensor ha adquirido demasiado protagonismo. Por eso Cultura lo ha echado para atrás.
El problema es que el informe favorable de Patrimonio es obligatorio para hacer efectivo el pago de la subvención de 503.000 euros del ministerio de Transportes destinada a la segunda fase de rehabilitación del castillo. Sin la luz verde de Cultura de la Junta no hay dinero del Gobierno central con cargo a la partida del 1,5 por ciento del presupuesto destinado a cultura. El resto del presupuesto, hasta alcanzar los 719.000 euros del presupuesto de la segunda fase, lo tiene que aportar el ayuntamiento. Es algo más de 215.000 euros lo que tendría que poner el municipio.
Lo que ha ocurrido con el rechazo de Patrimonio al castillete-observatorio ya estaba advertido cuando se aprobó el plan director, donde se advertía de la "repercusión que tendría el castillete paralepípedo de desembarco de escalera y ascensor en las referidas azoteas, repercusión que tampoco se analiza desde la plaza de España, con la posibilidad de una perspectiva alejada y a mayor cota". Esta advertencia está incluida en una serie de "cautelas" que hizo Patrimonio en su momento. El no haber tenido en cuenta esta cautela por parte de los técnicos del ayuntamiento, según Patrimonio, es lo que explica el informe desfavorable aprobado en la comisión del pasado 13 de octubre.
El acta de la citada reunión califica de "desproporcionada la dimensión del nuevo castillete propuesto, así como insuficiente la justificación del mismo". Añade que "la nueva consideración de la pieza deberá aportar información suficiente para la valoración desde el entorno" y que "la colocación de elementos de instalaciones debería realizarse de forma que quedaran no perceptibles tanto desde el entorno exterior como desde el interior por el propio visitante y no incrementaran la altura del castillete".
Y ahora qué. Ahora hay que modificar el proyecto de la segunda fase de rehabilitación. Pero eso supone mucho tiempo, tanto que podría acabar invalidando la subvención. Según ha informado a este periódico el alcalde, Francisco Martínez, la delegación de Cultura de la Junta ha aceptado que se presente una "memoria de corrección" que comprometa por escrito el modificado del diseño del castillete-observatorio. Con eso sería suficiente, según el alcalde, para obtener de Patrimonio un informe "favorable condicionado" que serviría para satisfacer al ministerio de Transporte y seguir avanzando en el trámite de la subvención de medio millón de euros.
La modificación del proyecto habrá que hacerla de todas formas para que el polémico castillete pierda protagonismo, pero lo que intenta el ayuntamiento es que no sea ahora, sino una vez recibida la aprobación de Patrimonio. Ése es el quid de la cuestión. De no aprobarse el proyecto el próximo miércoles habría un problema serio porque el ayuntamiento se vería obligado a presentar una modificación del proyecto en toda regla y eso sí podría comprometer la subvención. Todo esto podría haberse evitado si se hubiese tenido en cuenta el apartado quinto de objeciones de la comisión de Patrimonio reflejadas en el documento de aprobación del plan director del Castillo del Hierro.
