La comisión provincial de Patrimonio ha informado favorablemente este miércoles el modificado del proyecto de rehabilitación y adaptación para hotel de cuatro estrellas del convento de la Concepción de Carmona. El convento, de 40.000 metros cuadrados fundado en 1513, está constituido, además de por un núcleo monástico conformado por la iglesia y el claustro con sus crujías perimetrales, por una serie de edificaciones independientes de carácter doméstico conectados a través de variados pasos, vías, pasajes y patios que recrean una estructura urbana con sus callejuelas y plaza.

En general, las construcciones domésticas se encuentran bastante deterioradas, especialmente los forjados y las cubiertas, habiéndose producido el derrumbe de algunas piezas de las celdas cenobiales debido a la putrefacción de las estructuras de madera por la acción de la humedad y la pérdida de cohesión en los tabiques. No obstante, los muros se conservan bastante bien en general, salvo problemas puntuales en algunos dinteles y remates. El claustro y sus crujías perimetrales sólo presentan problemas de conservación de cubiertas y deformaciones por flecha en los forjados. La iglesia no está considerada en el presente proyecto al entender su autor que debe ser objeto de un proyecto específico de restauración integral.

Este modificado del proyecto, que ahora se aprueba, respeta el esquema tipológico actual del edificio, pues pretende conservar el compás, la iglesia y el claustro, y distribuye las zonas de uso común del hotel, como salones, comedor, recepción, servicios, accesos, etc., en la planta baja de este núcleo principal, mientras que las futuras habitaciones del hotel se distribuyen en la planta alta del edificio. Por lo tanto, la intervención se limita a adaptar la edificación actual al nuevo uso, conservando en lo posible los elementos, formas y proporciones de las distintas unidades edificatorias que componen el conjunto del convento, realizando sólo operaciones puntuales para adaptarlo a las exigencias normativas, tanto del uso específico como de carácter general (accesibilidad, protección contra incendios, condiciones térmicas y acústicas, etc.), y el desarrollo de instalaciones necesarias para su correcta utilización, minimizando la aparición de nuevos elementos edificados y la presencia
de maquinaria al exterior.