Bajo el lema "que ningún luchador o luchadora por la libertad y los derechos quede en el olvido", una veintena de descendientes de los hombres y mujeres que dedicaron parte de sus vidas a resistir contra la dictadura franquista preparan una serie de actividades de homenaje y reconocimiento a aquella labor, muchas veces sacrificada y silenciosa, cuyos frutos disfrutaron las generaciones posteriores. Los asistentes a la convocatoria son hijos, nietos o hermanos de los Catalinos, Tío los Hierros, Rebustiano, Michiclorio... que participaron en el movimiento obrero fontaniego renacido después de la guerra.

El primer encuentro ha tenido lugar este viernes en la biblioteca de Fuentes por iniciativa de la Asociación Memoria, Libertad y Cultura Democrática. Hasta ahora, esta asociación había centrado su actividad en buscar los cuerpos y homenajear a las víctimas de la represión franquista después del golpe militar de 1936. Ahora se trata de reconocer el sacrificio de los que mantuvieron viva la llama de la libertad y de los derechos de los trabajadores durante los años negros de la dictadura. La intención de la Asociación de la Memoria es hacerle un homenaje a los que aún viven y a los que ya no estén, hacérselo a través de sus familiares.

Para ello, se va a abrir un proceso participativo que culminará en el otoño con el citado homenaje. Ese proceso servirá para recoger sugerencias sobre el acto central y, a la vez, para aglutinar a los descendientes de los luchadores. Sobre la mesa hay algunas propuestas, como son la elaboración de un registro de luchadores por la libertad y los derechos obreros con la intención de que ninguno quede en el olvido. También se pretende crear un mural formado por los nombres de quienes se sacrificaron por la mejora de las condiciones de vida de las siguientes generaciones.

Dentro de dos semanas, el 11 de junio a las 20 horas, habrá una nueva reunión en la biblioteca para seguir ampliando el número de descendientes de los luchadores históricos y para recoger ideas sobre los actos de homenaje. A continuación se fijará un lugar público donde todo el que quiera apuntar a un familiar en el registro de los luchadores. "Que ningún militante de la resistencia contra el franquismo quede en el olvido.