-¿Papá que significa la palabra rendición?

-No lo sé, nosotros somos palestinos.

Encontré esta expresión en el libro de Mikel Ayestarán Historias de Gaza y se me quedó grabada en lo más hondo. Sé, por seres muy queridos, cómo es el alma palestina, cómo son capaces de sobrevivir al dolor de los amigos y familiares muertos o encerrados sin juicios en cárceles israelitas; cómo son capaces de reír, bailar ente la adversidad más cruel. Su sentido de la hospitalidad hace que cuiden al visitante, les ofrezcan lo mejor. En Gaza ya no es posible esa vida, están viviendo un exterminio sin medida, cada mañana dan gracias por permanecer vivos, aunque a veces, según las palabras de gazatíes, preferirían morir a seguir sufriendo una muerte lenta de hambre, de sed de injusticia y olvido.

Somos responsables de lo que está ocurriendo en Gaza. Qué podemos hacer nosotras, pensamos, y entonces me viene a la memoria la última estrofa del poema de César Vallejo Masa, donde un solo hombre por amor intenta devolver a la vida a un asesinado en la batalla. Toda la humanidad acaba rogándole que vuelva a la vida, entonces todos los hombres de la tierra le rodearon. Cuando les vio el cadáver triste, emocionado, incorporóse lentamente, abrazó al primer hombre; echóse a andar… Toda la humanidad venciendo a la muerte.

Así podríamos vencer el mal de la guerra en Gaza y en todo lugar donde exista la guerra cruel y sin sentido. Lo que está ocurriendo en la franja de Gaza mientras miramos para otro lado nos deshumaniza, nos lanza cada vez más lejos de lo que se suponía que habíamos aprendido de la historia. La historia de Gaza no empieza el 7 de octubre de 2023, es una historia larga de resistencia bajo el bloqueo, el exilio, la pérdida de la tierra, incluso del intento de acabar con todo un pueblo y su cultura.

Por eso es importante saber de su literatura, historia, música, cocina danzas, leyendas, nanas, de qué y cómo ríen, aunque en estos momentos sus risas estén sepultadas bajo los escombros y la muerte. Nada será igual después de lo de la Gaza, los genocidas del mundo sabrán que sus crímenes pueden quedar impunes. Hemos perdido la inocencia y los políticos se han olvidado de quiénes son y para qué están donde están; el poder y el dinero se han adueñado del planeta.

Qué más podemos decir del genocidio de un pueblo como el palestino. Lo estamos viendo en la televisión, escuchándolo por la radio, leyéndolo en la prensa. Sí, debemos seguir alzando la voz, unirla a toda la humanidad como en el poema de Vallejo, para no caer en el colapso moral, tal vez entonces parará la muerte del pueblo de Palestina y se alzará libre para volver a su tierra y a sus campos de olivos y naranjos.