"Vaya usted a su centro de salud". "No, eso tiene que hacerlo en Salud Responde". "Llame por teléfono al centro de salud". "Pida cita en la aplicación Click Salud". Y vuelta a empezar: "llame usted al centro de salud. No, en Salud Responde, en Click Salud"... Salud no responde, en el centro de salud echan balones fuera como pueden, las líneas están saturadas. ¿Qué está pasando ahora si hasta hace unas semanas todo iba aparentemente bien? ¿Por qué no han seguido llamando individualmente a las personas para que vayan a vacunarse?
Lo que está pasando, según todas las fuentes consultadas, es que el ansia de ponerse medallas políticas ha provocado el caos en el sistema de cita previa para la vacuna. Lo que pasa es que con el afán de que Andalucía figure como la comunidad más "eficiente" a la hora de vacunar, todas las semanas se rebaja la edad de los que pueden pedir cita para vacunarse, pero no hay suficientes vacunas para todos. "Andalucía va por delante", dice el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, y pide a los que tienen menos de 40 años que acudan al centro de salud o llamen a Salud Responde para pedir cita.
Pero la realidad es otra. La realidad es que a Fuentes, por ejemplo, llegan entre 600 y 800 vacunas a la semana, los martes. Vacunas que se "agotan" en quince minutos porque hay miles de personas llamando o acudiendo continuamente al centro de salud a pedir cita. La consiguen unos pocos y los demás, a esperar, a seguir llamando, a seguir asomados a la pantalla del móvil intentando inútilmente acceder a la pestaña de Salud Responde y que no le diga "su centro de salud no dispone en este momento de vacunas, siga intentándolo".
Mientras, los empleados del centro de salud de Fuentes echan balones fuera como pueden. El director no está, la coordinadora de enfermería está en La Luisiana poniendo vacunas, el teléfono echa fuego y el vecino o la vecina echa humo harto de que nadie le responda. Una fuente sanitaria del centro de salud ha reconocido a este periódico que todo el problema está en que se "vende" eficacia vacunando, pero la realidad es que ahora el sistema de citas se les ha ido de las manos. "Al incluir cada vez a más población, pero no llegar suficientes vacunas, cada martes se produce una especie de rifa en la que el premio se lo lleva el que está pendiente, no el que tiene más edad".
Eso explica que haya personas con 38 años vacunada y personas con 58 o 65 años que no consiguen cita. El desbarajuste es considerable y las protestas han saltado un poco por todas partes. Hay quienes se muestran decididos a plantarse en el centro de vacunaciones de La Luisiana y no salir de allí hasta que le suministren la ansiada dosis. El personal sanitario sufre un bombardeo de quejas y da explicaciones como puede. "Siga intentando en la aplicación Salud Responde". Especialmente los martes a media mañana. En Salud Responde le dicen que llame o vaya al centro de salud, donde lo vuelven a remitir a Click Salud, a Salud Respondes.... Vuelva usted mañana.
En pocos días, el consejero de Salud remitirá a los medios de comunicación una nota en la que dirá que Andalucía sigue batiendo récords de vacunas y que va por los 30 años. Lo que no dirá es que va dejando atrás un reguero de miles de cabreados porque tienen 50, 55, 60 años que no logran que los vacunen. Salud no responde.