Este fin de semana en el salón de la Huerta ha habido oportunidad de disfrutar del teatro de Federico García Lorca. Palabras mayores. El viernes con la compañía “Harta Teatro”, formada por un grupo de jóvenes que con su producción "Enlorquecidas" brindaron un paseo poético-musical por el mundo lorquiano. En él, las mujeres son dueñas de la escena para contar sus penas, abandonos, amores, soledades, ansias de libertad, poesía, sobre todo la poesía. El misterio de la belleza de Federico. No hubo poeta como él, dueño del país de las metáforas e imágenes más extrañas, misteriosas, que ni él mismo podía explicar. Las jóvenes artistas de Harta Teatro llenaron el escenario de la Huerta de música. Arte, nostalgia y teatro, mucho teatro.

El sábado fue la compañía “Colectivo Las Bernardas” las encargadas de representar el drama quizás más universal de García Lorca “La casa de Bernarda Alba”. Viendo, oyendo, sintiendo las vivencia de las hermanas Angustias, Martirio y Adela, simbolismo del teatro del poeta de Granada. Igual que el caballo desbocado, se adentra en el sofocante ambiente de la casa de Bernarda, símbolo del poder que arrastra desde tiempo inmemorial a las mujeres a guardar unas apariencias que las ahoga entre cuatro paredes. Mientras, los hombres, sin tener siquiera que aparecer en escena, van marcado el compás de todo lo que pasa. Ellos son los dueños de la vida y la muerte. Las mujeres como Bernarda sólo cumplen el mandato que ellos les dan, ella es en realidad un hombre con cuerpo de mujer.