Andalucía compra moderación. Juanma Moreno será presidente otros cuatro años y en esta ocasión sin necesitar a nadie. Juanma sin muletas. No necesita a Ciudadanos ni a Vox. Los electores han concentrado su voto en la opción más conservadora. Que todo siga igual que hasta ahora es el mensaje del electorado. Que no haya lugar al mercadeo de votos en el Parlamento Andaluz. Por eso le ha otorgado carta blanca al partido que ha gobernado Andalucía en los últimos tres años y medio. La participación ha sido del 58 por ciento, más de dos puntos mayor que la de 2018.

En ese sentido, no ha habido sorpresas. Si acaso, esa holgada mayoría absoluta del PP, con 58 de los 109 diputados del Parlamento. Y el frenazo de Vox, que no es tan fiero como lo pintaban las encuestas. Se queda con 14, dos más. Y, sobre todo, se queda sin la vicepresidencia de la Junta que ya creía tener en la mano. Todo lo demás, según las previsiones. El PSOE pierde el liderazgo electoral, aunque mantiene el tipo con 30 escaños, tres menos de los que tenía. El descomunal batacazo de Ciudadanos era esperado, quizá no tanto como el que ha sido. Ciudadanos desaparece del mapa electoral de Andalucía. Ni siquiera Juan Marín será diputado y pasa de la vicepresidencia de la Junta a la calle.

El otro fenómeno esperado es la importante caída de las dos principales formaciones situadas a la izquierda del PSOE, fruto sin duda de la división y del enfrentamiento interno. De esas dos, la candidatura de Inma Nieto ha sido la más votada, que obtiene cinco diputados con el 7,6 por ciento de los votos. Por su parte, Teresa Rodríguez de Adelante Andalucía queda con 2 diputados y el 4,5 por ciento de los votos.

El tirón moderado del PP de Juanma Moreno ha sido tan fuerte que Fuentes ha estado a punto de protagonizar un vuelco histórico. Apenas 77 votos separan a los socialistas de los populares, algo inédito en la historia de la democracia en Fuentes. El PSOE ha obtenido 1.235 votos (33,58%) y el PP el 1.158 (31,48%). En 2018 la diferencia fue de 865 votos. El otro dato para la sorpresa es que el partido que gobierna el ayuntamiento de Fuentes pasa de segunda a tercera fuerza en las autonómicas. En 2018, con 1.098 votos (29,5%) superó al PP en un 16 por ciento y en esta ocasión (sumando los votos de Por Andalucía y Adelante Andalucía) queda por detrás del PSOE y del PP con sólo 842 votos. La suma de esos partidos dio un 29,5 por ciento a la izquierda, frente al 22,64 por ciento ahora.

Se da la circunstancia, además, de que el alcalde, Francisco Martínez, ocupaba el puesto número doce de la lista de Por Andalucía. Su presencia no ha evitado la caída de votos registrado por su formación en Fuentes. Adelante Andalucía, la otra candidatura a la izquierda del PSOE, ha obtenido en Fuentes un total de 199 votos. Un dato a tener en cuenta es que sólo la derecha y la extrema derecha suben en Fuentes. Por supuesto, el PP el que más. Pero el ascenso de Vox también es notable, al pasar de 167 en 2018 a 252. Otros 85 fontaniegos se unen al partido anti andaluz.