Antonio Manuel no tiene apellidos. O mejor dicho, no los necesita porque todo el mundo lo conoce así. Antonio Manuel a secas. Como no los necesitan Víctor Manuel y Ana Belén. Este viernes en el Castillo del Hierro, a las 21:30, presenta su libro "Arqueología de los jondo", una inmersión en la tradición flamenca con la ambición de realizar catas en los estratos más profundos y auténticos de las raíces de lo andaluz. Antonio Manuel pondrá la palabra, José María Cala el cante y Carlos Llave la guitarra.

Lo primero que matiza Antonio Manuel es que en realidad lo que presenciarán quienes acudan mañana noche al Castillo del Hierro no es una presentación al uso, sino un espectáculo al que le darán forma las palabras, los cantes y la música. Palabras, cantes y música que nos definen como pueblo, dice el autor cordobés. Apunta que "lo que vamos a presentar es un viaje a los orígenes de lo flamenco y al pueblo que lo alumbró, Andalucía". Trazas de lo jondo en su nicho más genuino.

Para que se produjera el flamenco tuvieron que darse varias circunstancias, un espacio geográfico, una lengua irrepetible, una mixtura de culturas y el magma de la persecución y la marginación de todo un pueblo. Un espacio geográfico, sostiene Antonio Manuel, que no coincide exactamente con lo que hoy conocemos como Andalucía. "En realidad, Andalucía no es un territorio, sino una memoria sin fronteras, en vez de unas fronteras sin memoria", resalta. En ese sentido, le emociona el nombre de Fuentes de Andalucía. "No puede haber mejor metáfora que ese nombre para definir el pilón en el que confluyen todos los caños de agua de la cultura de culturas que es el flamenco".

Cultura de culturas en la que confluye la música de los gitanos, los negros, los conversos, los americanos... Antonio Manuel lo explica diciendo que hay negros en Sudán, pero allí no hay flamenco. Hay gitanos en Hungría, pero allí no hay flamenco. Para que haya flamenco se necesitaba el molde, el recipiente, y éste sólo se da en Andalucía, el pueblo que lo parió. "Por eso el flamenco no admite otra lengua que el andaluz, lo cante quien lo cante y donde lo cante".

Antonio Manuel sostiene que "los andaluces hemos olvidado el porqué de nuestras cosas. Las hacemos porque sabemos hacerlas, pero no sabemos por qué las hacemos". Por qué Andalucía habla como habla, piensa como piensa y siente como siente. De todo eso trata el espectáculo de este viernes en el Castillo del Hierro. Trata de explicarnos entre andaluces el porqué, los porqués de tanta cultura en sí, los porqués del flamenco que deberían hacer que se convierta en cultura para sí. El libro "Arqueología de lo jondo" es un repositorio, un ´almario`, del flamenco" que debe servir para devolverle la razón de su existencia, la teoría, el porqué, la causa que cayó en el olvido del pueblo andaluz.